La familia de Don Víctor Figueredo, poblador de Loma Merlo, Luque, llevó a cabo ayer una amena fiesta de cumpleaños al patriarca de la familia, que cumplió nada más y nada menos que 101 años de vida. El motivo de la decoración fueron los colores de su amado Cerro Porteño.
Al ser consultado sobre el secreto de su longevidad, además de tener en cuenta a Dios y Jesucristo, dijo -con impresionantes sentido del humor y lucidez- que un alimento especial es “mandi’o chyryry cebolla hetáreve pira kyrápe (mandioca frita en aceite de pescado con mucha cebolla)”.
Don Figueredo nació en Benjamín Aceval el 7 de enero de 1920. Desde niño fue criado por su abuela, ya que la madre trabajaba en el Chaco. Volvió a ver y conocer realmente a su madre a los 19 años. Gran parte de su vida vivió en Loma Pyta.
Conoció a su esposa Doña Antolina Ayala en una desaparecida fábrica inglesa de carne conservada, pero la historia es más vieja ya que fueron compañeros de escuela, en la N° 858 “Juan Javaloyes y González” de Luque. Tuvieron 11 hijos, quienes les dieron nietos, bisnietos, y tataranietos, reportó el periodista de ABC Rodolfo López.